¿Estamos a la última?
"Espectros de Artaud. Lenguaje y arte en los años cincuenta". Antonin Artaud. Museo Nacional, Centro de Arte Reina Sofía.
Lara Cuevas del Peso.
Espectros
de Artaud. Lenguaje y arte en los años cincuenta. Compuesta por un gran número de salas,
la exposición de Antonin Artaud se centra en los temas del teatro, el cine, el
dibujo y la radio, todos ellos medios de expresión artística, cuyo objetivo es
transcender los límites del lenguaje, ya sea escrito o hablado. Esta exposición,
no solo cuenta con obras de Artaud, sino que es un conjunto de obras de
artistas, interesados en el arte de la posguerra y en diferentes cuestiones
relativas al lenguaje, otras obras en las que se puede apreciar la influencia
de Artaud.
Durante toda la exposición
es notable la participación del espectador, con el que el autor quiere
comunicarse a través de su obra, convirtiéndose esta en un enlace, en un canal
de comunicación, siendo intensa para algunos, clara para otros o simplemente vacía.
La mayoría de las obras están repletas de símbolos, palabras, dibujos y formas geométricas
que parecen colocados sin ningún tipo de orden lógico y que no parecen tener un
significado o una conexión entre ellos, pero la tienen, aunque personalmente me
costó creerlo.
Artaud no queriendo
dejarse nada en el tintero y volcándose totalmente en su obra, nos deja entrar
ya no solo en sus sentimientos y aspiraciones, sino también en sus recuerdos,
consintiendo que conociéramos sus problemas mentales y las sesiones de electrochoque a las que estuvo sometido y plasmándolas en su obra a través de un vídeo en la que su protagonista llamada Lygia Clark, es capaz de expulsar una
vagina del cuerpo de un hombre a través del ombligo. Este conglomerado de sin
sentidos te deja atónita y es en este momento cuando empiezas a plantearte porqué
todo esto es considerado arte, qué es realmente el arte y donde se encuentran
los parámetros que lo definen.
Navegando entre todo
aquel caos, y dispuesta a no irme de allí sin haber al menos alcanzado la
superficie del entendimiento, me senté para ver un largo vídeo en el que
quedaba reflejada con total claridad una apuesta a por la innovación. Es una crítica
al cine de su época, en la que dice que hay que hacer todo lo contrario a lo
que se cree que es el cine.
El hecho de ser una
exposición y que cuyo autor la creara en el tiempo de la posguerra, obviamente,
queda reflejado el surrealismo, más concretamente el movimiento denominado letrista, contextualizando la obra en el
ambiente del vanguardismo y del dadaísmo y como un buen contemporáneo, Artaud
realiza un pequeño homenaje a Salvador Dalí en su obra con un solo cuadro,
destacando por encima de los demás no por su facilidad de entendimiento, sino
por su color.
Siendo una exposición llena
de interrogantes, lagunas y caos, habiendo roto con la tradicional belleza del
arte y al que una iniciada en este estudio, está acostumbrada a ver, solo me
queda preguntarme ¿Por qué existe la posibilidad de no entender el arte contemporáneo,
si precisamente nos enorgullecemos de “estar a la última”?
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