LeireG.Balsón -Artaudllage.

Artaudllage

Museo Reina Sofía

Octubre de 2012

los espectros de Artaud

     ¿Cómo tomarnos lo que para nosotros no es sino una burla? Puede ser el largo camino que me queda por andar hasta lo erudito lo que me impide considerar como obra de arte lo que algunos llaman obra de arte, pero ¿por qué cerrarme a ello aun sin comprenderlo? 

   Esta exposición artística, en mi humilde opinión estudiantil, carece de la armonía y la belleza que reina en los pasillos del museo del Vaticano, o de la atracción que puede ejercer algo tan enigmático como la sonrisa de la gioconda. Sin embargo no debo arrebatarle su mérito.

   Un collage. Así es como quiero imaginarlo a falta de un término mejor o de una idea mejor. Fragmentos de hojas, metrajes, audiciones, proyecciones, etc. llenan el pasillo dedicado a Artaud -poeta, dramaturgo y director-.

     Letrismo. No sólo encontramos a Artaud en esta exposición, ya que lexpectros de Artaud no trata exclusivamente de él, sino que muestra su influencia a lo largo del sXX, para lo cual encontramos a Isou y Promerand, cuya fascinación por el estilo y el lenguaje de Artaud no tiene límite. De ellos dos también encontramos los cortometrajes con los que tratan el ciselure, la cincelada sobre la diapositiva.

      La Impureza Concreta es la siguiente pieza que encontramos en este collage. Aquí vemos que la influencia del marcado estilo de Artaud llegó también hasta Suecia, Brasil y Suiza, corriente que surcaron poetas como Öyvind o Ferreiro Gullar.

    Estos, junto con otros muchos fragmentos de este collage, muestran la trayectoria de la influencia de Artaud por casi todas las artes, ya que muy pocas quedan por nombrar. Una mente tan copleja y con el genio de Artaud nos es algo casi tan abstracto como nos lo resulta la propia exposición, de la que, se quiera o no, se sale con dolor de cabeza.

    Es interesante ver como el legado de un hombre se expande sin apenas él pretenderlo. Cada uno de los autores allí expuestos tiene una visión de él y cada uno crea su propia versión, su propio Artaud. 

      Crea un concepto que impacta contra nuestras frágiles y poco adiestradas cabezas. No es poca sensibilidad o desinterés. Simplemente no termina de filtrarse por nuestros poros. Aún entonces, es innegable que Artaud merece no una sino innumerables títulos con su nombre, sin embargo puede que esta no sea la forma idónea. Claro está que resulta difícil configurar una exposición de un artista más relacionado con la literatura, el teatro y la poesía, el mundo de las palabras, que con el mundo visual.

    A modo de conclusión y a pesar de la desilusión (y, ya que estamos, el mal humor) con la que salí de la galería, no dejo de recomendarla. Sentimientos encontrados se encuentran en cualquier parte. Ha de ser tomado no como actividad de disfrute, sino como ejercicio de open mind, un verdadero esfuerzo por desechar lo que no agrada e intentar absorber lo que de verdad merece la pena y que se encuentra escondido, bien escondido, pero se encuentra.

Leire Gambra Balsón.

Teoría del Arte, 110

16 de Octubre, 2012.